El futuro de la educación ya está aquí. Nos alcanzó de manera acelerada pero necesaria ante los cambios que produjo la contingencia sanitaria por SARSCoV-2 que, de acuerdo con datos del Banco Interamericano de Desarrollo, dejó a más de 165 millones de estudiantes en América Latina y el Caribe sin clases presenciales. Y aunque ese es ya en sí mismo un verdadero problema, la preocupación actual es la reincorporación de alumnos y docentes a un espacio fundamental, pero que dejó de ser funcional.
El mismo Banco reporta que la pandemia “podría causar una pérdida de 0.9 años de escolaridad en promedio”, impactando directamente en el desarrollo cognitivo de los alumnos. Además, padres de familia y maestros señalaron que entre sus principales preocupaciones está el velar por la salud y la seguridad en las aulas, sumado a si la inminente incorporación tecnológica a la educación será satisfecha por las escuelas existentes.
¿Cómo construir un regreso a clases adecuado? Es una pregunta que seguramente se hacen expertos en los campos pedagógico y educativo, que no pretendemos invadir o suplantar. Más bien, queremos mostrar cómo desde el diseño, arquitectura y construcción de proyectos con fines educacionales vanguardistas pueden satisfacerse las necesidades de esa nueva generación transformada y transformadora.
Considerando que dentro de nuestros servicios tenemos especialización en centros educativos de primer nivel y, tras haber revisado las lecciones aprendidas en cada uno de ellos, decidimos armar una guía de esenciales que nos dan como resultado una nueva escuela consciente del presente, vanguardista y comprometida con el futuro, proponiendo así ideas de valor para los profesionales de la educación de distintos niveles que busquen transformar sus prácticas y entornos.
La gerencia de proyectos educacionales
Una institución educativa es un inmueble con vida, por lo que gerenciar la construcción o remodelación del espacio debe planearse pensando en la Comunidad Académica: alumnos, docentes y staff administrativo o de apoyo. Así mismo, debe tenerse presente que las edades, roles y necesidades de esta Comunidad varían y se acomodan según el nivel educativo que se imparta en la institución.
Resulta fundamental poner al centro esa variedad de perfiles y requerimientos para entender que desde etapas tempranas deben considerarse procesos rigurosos de análisis, diseño, planeación y preconstrucción. He aquí la primera recomendación:
La arquitectura debe considerar desde los primeros planos los plafones e iluminación. Con respecto a los falsos cielos/plafones, resulta fundamental pensar en el dinamismo sin dejar de lado que su geometría y colores propicien la imaginación o bien el fin de esa aula en específico, además de que será de vital importancia que sus materiales y diseño cuiden rigurosamente la acústica y recomendaciones internacionales. Con respecto a la iluminación, se deberá de tener especial cuidado en la temperatura, intensidad y automatización, buscando propiciar luz natural y conciencia en el consumo eléctrico.
Esta última parte deja ver el papel que la tecnología juega en una institución educativa, pues la cantidad de recursos energéticos que se consumen en ella puede generar un aumento en los costos. Sin embargo, con la metodología adecuada y los dispositivos correctos se pueden conseguir ahorros considerables para el proyecto e incluso lograr el aval de organismos de reconocido prestigio y autoridad como el US Green Building Council, que otorga la Certificación LEED (Leadership in Energy an Environmental Design).
Por estas razones concebimos a la nueva escuela como un espacio innovador y sustentable, y por supuesto seguro (ver el apartado correspondiente) en el que toda la Comunidad Académica viva sus procesos de forma plena, siendo conscientes además del entorno y las necesidades propias de su región.
Debido a esto, la presente guía se desarrolla después de haber gerenciado la construcción y remodelación de instituciones que van desde el nivel básico (preescolar/primaria/secundaria) hasta la educación superior y especializada (universidades/escuelas de enfermería), ubicadas en las regiones Centro, Oriente y Bajío de la República Mexicana, y listas para la nueva era.
Punto 1. Elementos esenciales
Calendario de obra: Asegúrate de compartir con la institución y los involucrados (comités financieros, escolares y de padres de familia) un cronograma definido en el que dejes ver cuando ocurrirán las excavaciones, demoliciones, levantamientos y demás procesos que pueden generar polvo y ruido, afectando la salud y el desempeño de la Comunidad.
Referencia a la relación entre el término y comisionamiento de las áreas con el calendario escolar, comúnmente se nos ha pedido terminar entre mayo a julio para que las instalaciones nuevas sean utilizadas a partir de agosto/septiembre y consigo mudar o bien ingresar a los estudiantes a dichas áreas; aunque no sería un mal target, terminar en un noviembre o un marzo pudiera no ser tan adecuado o impactante para la escuela.
Hacer esto te permitirá establecer horarios definidos para la obra que no coincidan con los de la Comunidad y establecer medidas que permitan un curso adecuado de la obra, así como relacionarlos con el calendario escolar. Específicamente el término del proyecto y el commissioning suelen llevarse entre mayo y junio para que las instalaciones nuevas sean utilizadas a partir de agosto/septiembre, otras fechas tendría un impacto en el curso escolar.
Uno de nuestros proyectos, ubicado en el bajío de México, requirió el levantamiento de una barrera de lámina con más de 7 m de altura para mitigar el paso de polvo y ruido, separando la construcción de la rutina escolar.
Ubicación: Evalúa las condiciones del espacio y su entorno a través de un análisis que permita conocer con que otras edificaciones o rutinas convive la institución educativa para no interferir o bien para lograr una obra que permita armonía.
Para lograr esto pueden medirse los decibeles que se producen a raíz de los procesos de construcción. En el área metropolitana gerenciamos la construcción de una institución educativa ubicada en frente de un hospital, por lo que se realizó una medición del ruido provocado por la obra para no afectar las actividades que ocurren ahí.
Además, deben analizarse las rutas de ingreso y salida vehicular para facilitar la descarga y recepción de alumnos en horarios pico con el fin de no obstruir vialidades municipales. La recomendación es implementar un área de Drop Off.
Proveeduría y personal operativo: Establece una alianza estratégica con las empresas que distribuyen el material para hacerlos parte del proceso a través de capacitaciones y un proceso de sensibilización de las necesidades del proyecto, pues la logística debe tener un razonamiento de tal manera que la Comunidad Académica no sea perturbada durante su rutina.
Gracias a este tipo de labores es que la proveeduría y el personal sienten suyo el proyecto, haciéndose conscientes de que su permanencia en el proyecto es crucial para la rutina escolar. Una lección aprendida fue la instalación ingresos exclusivos de proveedores separados de las rutas de la Comunidad, además de un comedor interno para que todo se desarrollara en el área circundante a la obra, así como la mitigación del ruido por claxon durante la entrega de materiales.
Punto 2. Seguridad y bienestar
Garantizar que la institución educativa sea segura es crucial. Asegúrate de dejar claro el entendimiento de este punto ante los involucrados, pues si bien buscan un rendimiento financiero eficiente durante el proyecto, el bienestar de la Comunidad Académica será su prioridad.
CCTV: La cobertura de la videovigilancia debe abarcar los accesos principales, escaleras y accesos a baños. Esto permite mantener un orden en el flujo humano en las instalaciones y el comportamiento de la Comunidad Académica.
Nuestra recomendación, basada en lo implementado en una institución de educación básica, es dividir este CCTV en dos: seguridad y disciplina. El primero se encargará de la supervisión de los accesos, el perímetro, las zonas de equipos, y otros espacios en los que incluso externos puedan permanecer; mientras el segundo puede ser monitoreado por prefectos o personal destinado a supervisar la sana convivencia en el inmueble, disminuyendo considerablemente los ataques por bullying o acoso escolar.
En ese sentido, uno de nuestros proyectos educacionales de alto nivel incluyó también la instalación de un sistema de voceo conectado a la oficina de dirección, en la que además de dar indicaciones se puede supervisar el comportamiento de los alumnos en las aulas.
Normatividad: El proyecto debe realizarse bajo los estándares que la ley estipula y en el caso de proyectos educacionales la exigencia es mayor incluso que en corporativo o residencial. En México, por ejemplo, está la Ley General de la Infraestructura Física Educativa de la que se desprenden Normas que garantizan la construcción de un inmueble funcional.
Atendiendo a este punto de manera rigurosa, nos permitimos también revisar que estos reglamentos oficiales estén relacionados con el bienestar de la Comunidad Académica. Por ejemplo, en la selección de materiales (en la que ahondaremos más adelante) revisando aspectos como la densidad del acero, así como en la estructura. Para uno de nuestros proyectos de educación básica recomendamos una revisión rigurosa de pendientes máximas, tamaño de escalones y ubicación de baños.
Punto 3. Materiales
Construir una escuela eficiente y al mismo tiempo sustentable es posible. Desde la selección de materiales hasta el diseño de estrategias para el aprovechamiento de recursos, la escuela del futuro es capaz de combinar el aprendizaje con la responsabilidad social.
Materiales: Ten presente que todos los materiales generan emisiones que pueden provocar daños a la salud o propiciar un Síndrome de Edificio Enfermo que afecte los procesos cognitivos. Elige de manera responsable los proveedores que garanticen el cuidado en la cantidad de VOC (Volatile Organic Compounds), presentes en la pintura, recubrimientos, pisos, aglomerados de madera, entre otros.
Material | Uso/Colocación | Beneficio(s) |
Cristal monolítico (6mm) | Fachada | Reduce el uso de aire acondicionado, uno de los elementos que más energía consume. Logra disminuir la temperatura interna y permite el paso de la luz natural. |
Concreto | Muros/Pisos/Columnas | Regula la temperatura para lograr un mayor confort térmico, absorbe calor durante el día y lo libera por la noche. |
Impermeabilizante blanco | Azotea | La ganancia térmica se transmite al interior del edificio debido a su nivel de reflectancia solar de 82 (con poca pendiente) y de 39 (con pendiente mayor). Requisito para la obtención de la Certificación LEED. |
Plafones reticulares | Muros | Absorbe el sonido del área y evita el eco gracias a su NRC (Noise Reduction Coefficient) de +0.7. Debe tenerse cuidado de no cubrir toda la losa para no anular los beneficios del concreto). Requisito para la obtención de la Certificación LEED. |
Sensores de CO2 | Salones/Estacionamiento | Garantizan una medición adecuada de la ventilación, pues la acumulación de CO2 causa sueño en el estudiante. |
Como se aprecia en la tabla, algunos de los materiales son un requisito para la obtención de la Certificación LEED que otorga el US Green Building Council (USGBC). Al igual que lo hemos hecho en proyectos de interiores corporativos e industriales, logramos este mérito para una institución escolar del Bajío mexicano, lo que permitió obtener beneficios como la consciencia ante desafíos medioambientales y, al mismo tiempo, generando al inmueble un aumento en su plusvalía e imagen.
Punto 4. Materiales
Lleva a cabo los siguientes pasos para una selección de mobiliario adecuada:
- Realizar una serie de mockups entre distintos proveedores para elegir el adecuado.
- Poner especial énfasis en las patas. Este soporte tiende a desgastarse con el tiempo y por el balanceo propio de la rutina.
- Revisar la cubierta o forro para evitar que el paso del tiempo o el ocio causen algún daño.
Posiblemente al inicio de un proyecto no se tenga definido el mobiliario de salones o incluso durante la operación de la escuela esté destinado a cambiar constantemente de ubicación dentro de las aulas, por lo que recomendamos dejar una cuadricula de contactos en el piso para dar servicio a toda el área (algo que no se puede lograr si se colocan contactos únicamente en muro).
En cuanto a los muebles de baño, elígelos en función de las descargas. Esto permitirá ahorros considerables de agua:
- WC con consumo máximo de 4.8 lts/descarga (lpf)
- Mingitorios de 3 lpf
- Lavamanos de 1.5 litros/minuto (lpm)
- Regaderas de 7.6 lpm
Punto 5. Impacto ambiental
Vegetación endémica: el riego de pasto consume una gran cantidad de agua. Se recomienda la convivencia con especies resistentes a las sequías.
Cisterna de captación de aguas pluviales: determinar la zona para evitar que los químicos de su limpieza afecten el proceso, así como la precipitación media anual.
Sensores de movimiento: Apaga o reduce el uso de HVAC. Puede utilizarse por el desuso de la instalación o bien cuando se produzca la apertura de una ventana o puerta.
Conclusión
Construir el regreso a clases tiene un camino claro: el bienestar de la Comunidad Académica. Este espacio está más vigente que nunca gracias a una visión innovadora por parte del sector educativo, pero el de la construcción e inmobiliario juega un rol estratégico para conseguir que los millones de alumnos que vuelven a las aulas, así como el staff docente, administrativo y de apoyo, consigan transformar su futuro y el de la sociedad en general.